KISS ‘Monster’

Hoy en Rock Comix rescatamos una ilustración de KISS de Jordi del Río aprovechando que este año se cumple el 40 aniversario del cuarteto. Este dibujo ya apareció en el libro orientado a los más pequeños de la casa ‘La Pequeña Historia De Roc 2: Roc & The Rollers’ publicado por 66 rpm. Para  acompañarlo repescamos de la antigua versión de Rock On la reseña que hizo Alberto Díaz de ‘Monster’, el último disco en estudio de los de New York.

kiss _colorInvocando al rugiente espíritu de Creatures of the Night, KISS dan el siguiente paso lógico en su reciente y renovada trayectoria. Si Sonic Boom ejerció de (nueva) carta de presentación, recuperando la exuberancia sonora de sus obras clásicas a través de una apabullante exhibición de su faceta más festiva y luminosa, con Monster el timón ha virado hacia parajes más oscuros y directos. El truco para atrapar todavía más al fan de toda la vida es, según palabras del propio Gene, haberse currado un disco sin medios tiempos ni baladas (como si estas no fueran degustadas a placer por cualquier KISS-head que se tercie, vaya); realmente, da igual cómo nos lo venda el avispado Simmons: el álbum funciona por sí solo gracias a su inmediatez y espíritu canalla, que igual roba/homenajea riffs de bandas consagradas (desde MC5 a los Zeppelin) como reconstruye su propia caricatura con un desenfado y una frescura poco habituales en una banda liderada por sexagenarios. El recital de tópicos es tan previsible como agradecido, y aunque la colección de canciones de turno no resulte tan memorable como ciertos himnos de su más reciente discografía, podemos toparnos de morros con más de un tema para enmarcar: «Freak» y «Long Way Down» vuelven a traernos a un Paul Stanley orgulloso de su condición de romántico outsider entregado a la causa (las féminas y el rock’n’roll); «The Devil Is Me» y «Back To The Stone Age» retrata -otra vez- la cara más salvaje y sinvergüenza del viejo Gene; la divertida «Outta This World» mete al esforzado Thayer en el espacial pellejo de Ace y, como no, en «All For The Love Of Rock’n’Roll» el felino Singer tratan de fotocopiar, con bastante acierto, los marramiaus soñadores del añorado Peter Criss. De todo para todos, como tiene que ser, para que la fiesta no decaiga. Y es que hay que reconocer que, prejuicios aparte, Gene y Paul pueden presumir de haber sobrevivido contra viento y marea a los vicios y virtudes de su propia leyenda, siendo todavía capaces de facturar estupendos trabajos que, lejos de hacerles ganar nuevos seguidores, mantendrán de lo más contentos a sus fans de siempre

ALBERTO DÍAZ

 

Deja un comentario